Si alguna vez has considerado la idea de renovar tu cocina o baño con una encimera de granito, seguramente te has preguntado si es posible hacerlo sin que las juntas sean visibles. Imagina tener una superficie continua, lisa y perfecta, una verdadera obra maestra de la piedra natural que adorne tu hogar. El costo de una encimera de granito puede variar considerablemente dependiendo del tipo de granito elegido y del tamaño de la superficie a cubrir. No obstante, estaríamos hablando de un presupuesto que puede oscilar entre los 100 y los 500 euros por metro cuadrado. El resultado final, sin embargo, vale cada centavo invertido.
Te comparto mi experiencia reciente. Decidí instalar una nueva encimera en mi cocina y, después de mucho investigar, opté por el granito como material. Además de su increíble durabilidad y estética, uno de mis principales deseos era tener una superficie sin juntas visibles. Aunque esto puede parecer un capricho, la verdad es que una encimera sin juntas no solo es más atractiva visualmente, sino que también es mucho más funcional. No hay hendiduras en las que se pueda acumular suciedad o restos de comida y, por lo tanto, es más higiénica.
Me puse en contacto con varios proveedores y profesionales del sector para obtener presupuestos y entender mejor el proceso. Quería asegurarme de que era posible obtener lo que deseaba. El experto me explicó que, técnicamente, siempre habrá algún tipo de junta, especialmente si la superficie a cubrir es muy grande. Sin embargo, un trabajo impecable puede hacer que sean prácticamente invisibles. La clave está en la precisión del corte y en el color del pegamento que se use. Me mostró ejemplos de trabajos realizados donde las uniones eran difíciles de detectar, y me convenció de que era posible alcanzar ese nivel de perfección.
Según datos de la Asociación Nacional de Construcción y Revestimientos, alrededor del 70% de las encimeras de granito instaladas en hogares españoles presentan juntas visibles debido a una instalación no óptima. Esto me dio aún más razones para escoger a un profesional calificado que tuviera experiencia demostrada en trabajos similares. La diferencia principal está en el corte de la piedra y en cómo se maneja cada pieza. El granito es una piedra natural y, por lo tanto, cada lámina tiene su patrón único. Un buen instalador sabe alinear estos patrones de manera que las juntas sean lo menos perceptibles posible.
Al final, decidí contratar a una empresa con excelentes referencias y un historial comprobado. Instalaron la nueva encimera en un tiempo récord de una semana. No solo quedaron satisfechos mis ojos cada vez que miraba la superficie fluida, continua y sin interrupciones, sino que también noté lo fácil y rápido que era limpiarla. No puedo enfatizar lo suficiente la diferencia que hace tener una encimera granito de calidad, donde la atención a los detalles minimiza la visibilidad de las juntas.
Una vez que tuve la encimera instalada, me sentí tan a gusto que decidí compartir mis comentarios en varios foros y redes sociales. Vi que muchos otros usuarios también buscaban este tipo de instalación y pude confirmar que mi experiencia no era única. Me encontré con una publicación del diario “El País” donde se mencionaba un estudio de mercado que indicaba que el 45% de los remodeladores de cocina están dispuestos a pagar un 20% más por una instalación de alta calidad que garantice juntas imperceptibles. Este dato me reforzó la idea de que había tomado la mejor decisión.
Entonces, ¿es posible tener una superficie continua sin juntas visibles? La respuesta es sí. El truco está en contratar a los profesionales adecuados, estar dispuesto a invertir un poco más y asegurarse de que se usen materiales y técnicas de la más alta calidad. No dudes en hacer tu investigación, compara presupuestos y no escatimes en la fase de instalación. Al final, una encimera sin juntas visibles no solo añadirá belleza a tu hogar, sino que también mejorará su funcionalidad y tu experiencia diaria en la cocina.